Viernes
19 de abril de 2013 | Publicado en edición impresa
Ernesto
Claudio
El placentero
camino del teatro
Estrena Miembro del jurado, dirigido por Corina Fiorillo
Tiene treinta años de carrera o de
"camino", como prefiere llamarlo, y una continuidad de trabajo
notable entre el teatro y la televisión. Ernesto Claudio pasa de un proyecto a
otro, destacándose siempre y manteniendo un marcado bajo perfil. La temporada
pasada participó del elenco de Las descentradas , de
Salvadora Medina Onrubia, y luego, junto a Martha Bianchi, recreó El
amante , de Harold Pinter.
Ahora, inicia el año protagonizando, en el Teatro
Nacional Cervantes, Miembro del jurado , un texto de Roberto
Perinelli, creado en 1979. Allí comparte el elenco con Silvina Bosco y Roberto
Vallejos. La dirección es de Corina Fiorillo, creadora que, con anterioridad,
ha montado de dos obras de Perinelli: Desdichado deleite del destino y Un
hombre amable entró a orinar .
"Hacer una pieza de Roberto me da mucha
emoción -cuenta el actor. Este es un policial con varias vueltas de rosca que
hacen que la situación se haga cada vez más complicada. El personaje es muy
atractivo. Al comienzo no tenía la más mínima idea por dónde encararlo y,
cuando un texto se me presenta así, me gusta. Más que vivirlo como un desafío,
trato de confiar en el proceso que uno va a realizar. Me agrada ver cómo actuar
a contrapelo de lo que el texto dice. Con los compañeros hicimos un proceso
realmente bárbaro."
Si bien esta es la primera vez que el intérprete
trabaja con Corina Fiorillo; con Silvina Bosco y Roberto Vallejos son viejos
conocidos, compartieron otros espectáculos y Claudio dice que, con ellos,
"voy como en barco".
Miembro del jurado muestra la relación entre un ex convicto, recién salido de la cárcel y
un hombre que le ofrece inesperadamente un trabajo. La desconfianza, primero, y
la necesidad, después, harán que el hombre acepte trasladarse hasta un taller
de cerrajería. La aparición de una prostituta dará un giro intenso a la
historia.
"Lo que tengo que actuar a partir de Mejía, mi
personaje - explica Ernesto Claudio, es un doble juego. Soy amable y perverso a
la vez, y ese matiz me resulta muy inquietante. Y esto lo hemos profundizado
mucho en el trabajo con Corina. Ella es una directora muy interesante porque,
aunque tiene muy claro por dónde quiere ir, verdaderamente escucha al actor y
sabe reacomodarse, según esas necesidades que aparecen durante el proceso de
trabajo."
Ernesto Claudio es casi abogado, pero nunca decidió
terminar su carrera. A la par que estudiaba leyes tomaba clases con Agustín
Alezzo y el teatro ganó la partida a la hora de la definición profesional.
"En realidad me daba mucho pánico actuar. Con
los años eso fue desapareciendo, pero te podría decir que no demasiado. Lo que
pasa es que esta es una actividad muy placentera. Recuerdo que en una oportunidad,
haciendo un curso con Hedy Crilla, ella me dice: «Viste Ernesto, qué cosa
curiosa, uno quiere hacerle creer a diez, veinte, cien personas, que es otro
durante una hora y media». Lo decía con una simpleza inmensa y es cierto. Yo
disfruto mucho actuar. Y cuando tenés la fortuna de hacer una pausa en el
escenario y sentir que el público respira, ese placer es inigualable."ß
Carlos Pacheco
Miembro del jurado
De Roberto Perinelli
En el Teatro Nacional Cervantes, Libertad 815.
Viernes y sábados, a las 19; y domingos, a las 18.30.
De Roberto Perinelli
En el Teatro Nacional Cervantes, Libertad 815.
Viernes y sábados, a las 19; y domingos, a las 18.30.
No hay comentarios:
Publicar un comentario