miércoles, 6 de marzo de 2013

Hallazgos inesperados


Hoy en medio de nuestro ensayo sucedió esto que uno adora cuando sucede, que es lo inesperado, esos hallazgos que uno bienviene tanto , desea y espera . Esos hallazgos que cambian un rumbo...

Voy por partes.

Hoy, mejor dicho ayer Martes, comenzamos nuestro ensayo con lo nuevo a plantear , a buscar. Habíamos hecho la noche anterior una lectura con marcación como para trazarnos una ruta a seguir, no más que un faro, pero no menos que eso...

En medio de ese devenir, entre la letra, el espacio, el acomode de lo que le sucede a cada uno, nos sucedió lo inesperado.
Sin contarles de tramas , ni de contenido, la escena era con un Mejía (Ernesto Claudio) sólido, bien plantado, hasta sonriente.. y un Simón (Roberto Vallejos) que se va levando (como el pan, si..)  entre esto y la comparsa que sucede en la calle alrededor de este íntimo universo .
La cuestión es que no me pregunten porqué, pero Ernesto en medio de nuestro ensayo, sin poder preveerlo él, entregado a lo que está sucediendo en el aquí y ahora se quiebra, cambia el rumbo rotundamente , nos lleva su accionar para otro costado totalmente diferente al planteado. Roberto ataja, reparte y sigue barajando encantado en lo que acaba de recibir. Desorientado, pero como buen jugador ataja, como buen compañero sostiene... Todo crece, cambia, como si ese instante no hubiera sido un instante, hubiera sido para todos mucho más que eso...
Silencio.

Ante este devenir tan diferente, tan rumbeado para otro lado, sin motivo aparente (porque la intencionalidad  era casi la diametralmente opuesta) .. ante esto, se frena la escena. Sola, o no... no lo sabremos nunca.
Todos estamos conmovidos, y casi sin palabras por lo que acaba de suceder.
Que supuestamente y en nuestros preconceptos, jamás debería haber sucedido...
Silencio.

Charla, respirar un poco de aire,  un mate.. aliviar ese cuerpo confundido y decidir, mejor dicho yo en lo personal, corroborar que la sabiduría más grande en la escena está ahí en ellos, en sus intuiciones que van más allá de sus preconceptos.. Como admiro al actor, como me regocija esa arcilla que intelige sin pedir permisos!

Decido , pese a todos los pronósticos y opiniones , dar cauce . Vear, mirar.. porqué no?

Confianza. Palabra suprema para mi . Ellos se atreven, no enloquecen, no me juzgan y juegan, y juegan tan pero tan tan lindo que no puedo dejar de pensar que las obras hablan por si solas, más allá de uno, de ellos.. de mi y de todo lo que pensemos.
Hoy, ahora, una vez más siento el  escuchar, el estar atento , el desechar , atreverse...

Rumbeamos agotadísimos, felices, SIMÓN y MEJÍA ya están entre nosotros,  ya los tienen puestos. Sin proponérselos, el encuentro .. la red, la escucha, el cuerpo, la obra como un mar que nos lleva.. son todas las cosas en las que me quedo pensando -

Lo inesperado es algo que me maravilla - Fin de ensayo -





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