Ayer viernes, tuvimos nuestro quinto ensayo. Es increíble como uno va sintiendo los tiempos, uno dice 5 ensayos y le suena poco. Pero uno siente 5 ensayos y es como "todo" por instantes. Ayer este universo que empezamos a parir no estaba, no existía para nadie... Hoy, ya empieza a fluir , casi como comenzando a ser ,sin apuros.. ..
Les cuento,
el espacio está comenzando de a poco a ser "nuestro", bah de ellos y yo los miro adueñarse de él y me gusta, mucho me gusta . Ya tenemos todo marcado en el 9no piso , que es donde ensayaremos hasta pasar a sala. De a poco nos adueñamos , de a poco el espacio se adueña de nosotros...
Simón y Mejías comenzaron a aparecer, y nos sorprenden - Como que nos agarran desprevenidos, lo cuál es hermoso, ese instante donde uno no espera y de pronto emerge algo tan tan bonito que uno tiene la certeza de que la cosa va por ahí..
Esta etapa de probar, sugerir, iniciar para desandar o no . Es algo que adoro. Siento que en el escuchar, en el jugar desprevenidamente, casi con la inocencia de lo no premeditado; ahí está , esperando como agazapada, por nosotros, ahí está ... . Ahí y en ellos que se miran y se potencian -Se perciben, se ayudan.
Los miro y me da serenidad el saberlos tan integrados y potenciados el uno con el otro. Los miro, sonrío en sus ocurrencias, festejo las apariciones ( intermitentes aún pero cada vez más certeras ) de Simón y Mejías, les ato algunas sogas (inevitable no hacerlo) y se las suelto al rato cuando sé que ya están ahí conmigo, con ellos, dentro...
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